capitulo 4

Félix no da crédito a las palabras de su hermana:
--¿qué tontería es esta?
--No es ninguna tontería... fuera está un hombre... es mucho menor que mamá, es muy guapo y seguro que mamá se acostó con él cuando éste era un crío... ¡vaya con mamá¡¡no le voy a permitir que se vuelva a meter en mi vida, con mis novios¡¡
Félix no escucha a su hermana y va hacia el exterior de la casa.
--quieres conocer a tu padre, ¿eh? yo sabía que tú lo querías conocer...
Félix está furioso:
--¡¡yo lo que quiero es partirle la cara... no voy a permitir que ese hombre ofenda a mi mamá¡
Milagros se va detrás de él:
--es tu papá... ¡¡lo tienes que respectar¡¡
María siente un dolor en el corazón muy fuerte. Sabe que debe tomar su pastilla pero no quiere que ese hombre que tiene delante la vea como una mujer enferma. Él luce joven y atractivo.
--¿te sientes bien?
María se siente ofendida, habla con dificultad ya que cada vez le hace más daño el pecho:
--¡¡sí ya sé que para ti sólo fui una vieja con la que querías aprender¡¡
--sé que me porté mal contigo pero estoy arrepentido y quiero conocer a mi hijo...
--¡¡tú no tienes ningún hijo en esta casa¡¡ --dice María muy molesta.
--yo sé que sí, Félix es mi hijo, por las fechas sé que es él...
--¡¡te recuerdo que en ese momento tú negaste que fuera tu hijo¡¡
--Lo sé... debes entenderme... yo sabía que habías estado con otros de tus alumnos... tu fama no era buena y...
Los hijos de María están detrás de ella. Milagros está sorprendida por ese aspecto de su madre que desconocía. Félix se ha quedado callado asombrado por la juventud del padre, le sorprende que su madre haya estado con un hombre que es mucho menor que ella pero aunque se había mantenido al margen no soporta que Rafael diga esas cosas de su madre y lo interrumpe y le dice:
--¡¡usted no diga esas cosas de mi madre¡¡¡qué se ha creído¡¡largo de esta casa, usted no tiene nada que hacer aquí¡¡
María está muy impresionada al ver frente a frente a su hijo y a su verdadero padre. Cada vez necesita más las pastillas pero no las quiere tomar delante de su antiguo alumno. Félix mira a Rafael con mucha rabia. Milagros mira fascinada a Rafael y dice a su hermano:
--respéctalo, es tu padre...
Rafael se emociona al confirmar que ese chico que tiene delante es su hijo pero le duele la rabia que le demuestra:
--hijo, eres tú... ¡¡que alegría verte¡¡
Rafael desea abrazar a su hijo pero Félix lo rechaza, está enloquecido:
--¡¡no vuelva a llamarme así, usted no tiene derecho a nada¡¡
--yo te di la vida... almenos creo que tengo el derecho de llamarte hijo...
Félix se lleva las manos a la cabeza con mucha rabia:
--¡¡usted se divirtió con mi madre y luego la abandonó, yo a usted no le debo nada¡¡todo se lo debo a mi verdadero padre y ese hombre se llama Manuel Ortega¡¡¡fuera de mi casa y no vuelva nunca más¡¡
Milagros se acerca a Rafael para hacerlo pasar:
--no seas maleducado, tu papá se queda a comer con nosotros... verdad?
María está muy afectada. Félix tumba a Rafael de un puñetazo.
--¡¡no hagas eso... es tu padre¡¡ --llora María.
Rafael queda tumbado en el piso. Milagros corre hacia él:
--¡¡eres un bruto, hermano¡¡
Félix mira con rabia a Rafael y le dice:
--¡¡eso le pasa por abandonar a mi madre y por volver¡¡
Félix cierra la puerta quedando él y su madre dentro y Milagros fuera con Rafael:
--ven, vamos a dentro... yo te curo esa herida...
Rafael se levanta:
--no te preocupes, gracias...
Milagros le toca el labio muy excitada:
--te va a quedar una herida muy fea...
--es que tu hermano no va a querer que entre...
--pues llévame a tu hotel y te curo...
--¿porque eres así conmigo?
--No sé... siempre deseé conocerte...
--¿así?
Milagros mira los labios de ese hombre con deseo:
--ahora veo que era mi destino.
Él está muy herido por el rechazo de su hijo, ella lo mira coqueta. Dentro de la casa, María por fin va a tomar las pastillas. Por la ventana, Félix ve como su hermana se va en el auto con Rafael. Se molesta.
--¿¿qué hace esa necia? ¡¡Milagros se está yendo con ese hombre¡¡
Félix sale de la casa para tratar de retenerla. María se ha quedado muy impresionada al saber que su hija se fue con su ex amante y no llega a tomar la pastilla ya que el dolor en el corazón la desploma en el suelo. Así la encuentra Félix. Parece muerta.
--¡¡mamá, no¡¡¡mamá¡¡
Félix la abraza angustiado. Grita, su madre no respira.


Rafael y Milagros han hecho el amor en un motel que hay en las afueras. Arrepentido él se viste a toda prisa. Milagros está feliz en la cama.
--te vas?
--si, tengo que volver mi esposa no se sentía bien --dice él muy frío.
Milagros se siente humillada al saber que él está casado. Se levanta envuelta en una sábana y le reclama:
--¿¿estás casado? ¿porque no me lo dijiste antes...?
--tú te me regalaste... has sido tú las que has insistido en seguirme hasta llevarme a la cama --dice él abrochándose los pantalones:
--¡¡fuiste el primero¡
--¿y si tu no lo valoras porque lo tengo que valorar yo?
--¡¡eres un imbécil por eso mi hermano te odia... pobre de tu mujer... ojalá algún día la tenga cara a cara y le pueda decir la clase de basura que es su marido...¡¡
Muy furioso él dice llevado por la rabia:
--¡tú te vas a quedar callada, pobre de ti que abras esa bocota que tienes..¡¡me imagino que no vas a querer que todo tu pueblo sepa que eres una cualquiera como tu madre, no?¡¡
--¡¡eres un imbécil¡¡
ella trata de bofetearlo pero él la agarra del brazo:
--¡¡nunca debí venir¡¡
--¡¡te odio, me das asco¡¡
Rafael la mira con desprecio y dice:
--¡¡pues si eso haces con lo que odias... ya compadezco a tus padres, les salió una hija ramera¡¡
Rafael se va y Milagros se queda furiosa. LLora de rabia.
--¡¡mi primera vez... fue mi primera vez¡¡¿¿que me pasó?¿¿qué??
Aunque le ha gustado mucho estar en brazos del padre de su hermano ahora se siente culpable:
--¿y ahora qué hago?¿qué?


Milagros llega a su casa, desea que nadie la vea para no tener que dar explicaciones. Le sorprende ver todo tan oscuro:
--¿donde estabas? --dice Félix muy serio encendiendo la luz.
--¡¡a ti que te importa¡¡
--¡¡Mamá ha muerto y tú seguro que estabas ves a saber haciendo qué...¡¡ --le reclama.
Milagros se ha quedado impresionada. No dice nada porque su hermano se le adelanta y con violencia le dice:
--Hueles a perfume de hombre ¿¿qué hacías mientras nuestra madre se moría?¿¿fuiste capaz de acostarte con él?
Félix zarandea a su hermana, está furioso:
--¡¡di¡¡¿¿te le regalaste a ese hombre como una ramera?
Asustada y con un hilo de voz, Milagros dice ante la mirada de estupor de su hermano:
--yo sólo quería ser amable y él abuso de mi...

Rafael va conduciendo en ese momento alejándose del pueblo. Piensa en el rechazo de Félix, el revolcón con Milagros.
--¿y ahora que le digo a Roberta?¡ ¡¡en buena hora se me ocurrió volver¡¡
LLora y pierde control del auto al tratar de secárse las lágrimas. Se estrella contra un árbol.