capitulo 5

Milagros está muy nerviosa. Espero que su hermano crea en sus palabras. Félix tiene el rostro desencajado por la rabia. Se lleva las manos a la cabeza:
--¡¡eso no puede ser...¡¡¡¡¡¡¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOO¡¡¡ese hombre no puede ser tan miserable¡¡
Félix llora de rabia. Aunque le duele que sufra, Milagros no quiere que nadie sepa que mientras su madre moría ella se acostaba con el padre de su hermano. Aprovechando la rabia que siente por el abandono del hombre, Milagros sostiene su mentira:
--¡tu padre me violó... fue horrible¡¡
Félix siente un odio atroz hacia ese hombre:
--¡lo voy a matar, lo voy a matar¡¡
--no déjalo... ese hombre es capaz de negar que... –finge borchorno-- es capaz de decir que me le regalé...¡
--¡¡que no se atreva...¡¡¿¿porqué de verás lo mato¡¡
Félix está enceguecido por el odio:
--¡¡lo voy a destruir, juro que le voy a hacer la vida imposible¡¡
--no sabes cómo ubicarlo...
--¡¡claro que sí, no vienen turistas a este pueblo... seguro que alguien sabe como localizarlo...¡¡
Milagros está muy asustada. No quiere que su hermano se enfrente a Rafael por temor a que se descubra que fue ella quien lo provocó y que todo fue consentido.
--no es bueno el rencor... ¡¡ese hombre es una basura que te puede hacer mucho daño¡¡
--¿¿lo ves?¡¡¡por eso yo nunca quise saber de ese maldito¡¡sabía que nada bueno saldría de su llegada¡¡
Golpea la pared llorando de rabia. Milagros se siente muy culpable por haberse acostado con él, lo abraza por la espalda:
--perdóname... yo ....
Milagros llora. Félix la acaricia, el guapo chico cree que los remordimientos de su hermana se limitan a haber querido conocerlo:
--tú no te tienes que sentir mal... ¡¡él es un desgraciado que merecía estar muerto¡¡

Por su lado, las autoridades del pueblo vecino levantan el cadáver de Rafael que ha muerto en ese choque. Registran sus cosas para tratar de averiguar de dónde venía para saber a quién avisar. Sólo encuentran el número de teléfono de Roberta. Roberta no tarda en recibir una llamada de teléfono:
--si, soy su esposa... ¿pasó algo?
La noticia de la muerte de su esposo le cae como un puñal que le atraviesa y parte en dos. Sufre una crisis de nervios y no acaba de escuchar el mensaje. Juan Segundo corre a auxiliar a su madre asustado. Trata de calmarla y de saber lo que ha pasado pero la mujer sólo grita y llora y no dice nada. Al ver que aún hay alguien al otro lado del auricular, Juan Segundo toma la llamada y mira con pena a su madre al saber que Rafael ha muerto. Aunque no le gustaba el esposo de su madre, le duele que su madre sufra una pérdida como ésa.
--si, sí... tomo nota... si claro... yo me haré cargo del cadáver de mi padrastro...
Cuando cuelga, Juan Segundo corre abrazar a su madre. Trata de calmarla:
--por favor... Bartolomeito no puede verte así, se va a asustar mucho...
Al ver que no logra calmar a su madre, Juan Segundo se dispone a llamar al doctor pero un terrible dolor en el vientre tumba al suelo a Roberta. La angustia de Juan Segundo es enorme.

Sin imaginar que su padre ha muerto, Félix descarga todo su odio en él:
--¡¡ le voy a hacer pagar por la muerte de mi madre y por tu deshonra...¡¡me las va a pagar... no sé cómo pero él no puede seguir viviendo tan feliz cuando ha matado a mi madre, cuando te ha destruido la vida a ti¡
Milagros mira a su hermano llorando:
--Lo de mi mamá no era broma?, yo creí que lo decías por molestarme...
Félix acaricia a su hermana:
--perdóname por haber sido brusco contigo... le dio un infarto por culpa de ese hombre...
Milagros está muy impresionada:
--no puede ser...
--papá nos espera... está en el tanatorio... vamos cambiate...
Milagros entra a la habitación. Félix golpea sus puños llenos de rabia.
Por su lado, Juan Segundo está muy angustiado en el hospital. Sale el doctor:
--¿y mi madre?¿cómo está?¿que le pasó?
--tranquílicese... ya todo está bien... se pondrá bien...
Juan Segundo suspira aliviado:
--que bueno que no fue nada... me asusté por esos dolores tan fuertes...
--todo está controlado pero no... no he dicho que no fuera nada... supongo que su madre aún no lo sabía porque apenas era el comienzo... ha sufrido un aborto espontáneo...
Juan Segundo mira al doctor horrorizado:
--¡¡no... eso no puede ser¡¡casi cada mes mi madre se hacia el test y daba que no¡¡
--pues este mes le hubiera dado que sí, pero... no se pudo hacer nada...
Juan Segundo está desesperado:
--que mi madre no lo sepa... va a ser terrible para ella saber que cuando por fin iba a tener el hijo con el que tanto soñó lo pierde...
--no se preocupe...
--¿la puedo ver?
--en un momento, cuando la subamos a la habitación.
Juan Segundo se queda solo muy angustiado:
--¿porqué ha tenido que pasar esto?¿porqué?

Justo en la madrugada, unas enfermeras entran en el cuarto de Roberta para controlarla. La mujer duerme y así que las dos enfermeras hablan tranquilamente.
--pobre mujer... a su edad tanto querer un hijo del marido y se embaraza cuando él se muere pero lo pierde....
Roberta estaba despierta y sufre una crisis de nervios:
--¡¡no, no... yo no puedo haber perdido un hijo... no puedo...¡¡
Las enfermeras en seguida le dan un calmante para que se vuelva a dormir.

Al día siguiente, Félix, Milagros y Manuel aparecen tristes en el entierro de María. Después se quedan los 3 solos frente a la tumba. Manuel se hace el fuerte, Milagros llora en sus brazos. Félix de rodillas en la tumba de su madre dice:
--¡¡juro que te voy a destruir... voy a acabar con tu vida¡¡voy a hacer que pagues por todo el daño que has hecho¡¡
Manuel deja a su hija y pone la mano sobre los hombros de su hijo:
--nada nos va a devolver a tu mamá...
LLorando sangre, Félix dice:
--¡¡pero yo me voy a sentir mejor¡¡
--el rencor nunca es bueno...
Félix se levanta y mira al viudo de su madre:
--¡¡si eso hombre no hubiera aparecido mamá estaría viva sin contar que....¡
Félix se calla porque Milagros le hace que no con la cabeza.
--¡¡nunca debió volver¡¡
--tu mamá estaba enferma del corazón... llegó su hora... --Manuel.
Félix está furioso:
--¡¡parece mentira que tú digas eso... ¿es que no la querías? Si tú no quieres vengar su muerte yo sí lo haré.
Félix se va corriendo, Manuel quiere seguirlo pero Milagros se lo impide:
--ahora está muy afectado... ya se le pasará... yo hablaré con él.
--tu hermano es un buen muchacho... espero que su corazón no se llene de rencor... sería una pena...